Para responderla, los doctores Gayle Brewer, de la Facultad Central Lancashire, y Colin Hendrie, de la de Leeds realizaron un estudio, anunciado en la revista \’Archives of Sexual Behavior\’, para el que entrevistaron a 71 mujeres de entre 18 y 48 años, y sexualmente activas. Una encuesta realizada por la firma de juguetes eróticos Bijoux Indiscret -en su página web se pueden colgar los audios de nuestros clímax- resalta que «un 51,9% de los hombres y un 60% de las mujeres emplea los gemidos para excitar a sus parejas a lo largo del comportamiento sexual y que «un 43,1% de los hombres y un 34,8% de las mujeres mantiene que gemir o vocear es indicativo de buen sexo». La cuestión es que gemir implica abandonarse, dejar atrás el pudor, concentrarse en la otra persona y no tanto en la práctica en sí. Obviamente, hay personas mucho más expresivas que otras tanto en la vida día tras día como en el sexo.
Por otro lado, la investigación se centró en el desarrollo de excitación de las mujeres, llegando a la conclusión de que hay, cuando menos, cuatro zonas con capacidad para generar exitación orgásmico en el cuerpo femenino. Si te pasa esto, que no sabes qué te están trasmitiendo con el estruendos que están haciendo, pregunta. Al fin y al cabo, todo/as hacemos diferentes sonidos, y gemimos de forma diferente, con lo que es complicado recopilar en un solo grupo los que son de un tipo o del otro. Lo destacado que puedes hacer es charlar con tu pareja y estudiar cuál es cuál.
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En la vida real, la mayor parte de mujeres son parcialmente distendidas, como si tuviesen un nivel predeterminado y pudiesen amoldarse al volumen que tenga su pareja y solo subirlo cuando el otro ha hecho algo que han sentido como increíble. \’Cosmopolitan\’ ha hablado con tres féminas sobre de qué forma prefieren tener sexo en un planeta que les da mensajes contradictorios sobre lo que realmente significa \’tener caña\’ o que sea duro en la cama. Nunca he sentido el deseo de gemir tan fuerte como una mujer, pienso que gemir es una cuestión de actitud, cada persona vive sus conmuevas desde su carácter personal.
Me agrada, para mi escucharlo gemir tan fuerte es excitante y asimismo sé que el goza. El estudio indica que depende de la personalidad del hombre, si es tímido no lo escucharas gemir. Menciono el porno, porque la mayoría hemos visto algún vídeo, ya sea por idea o por predominación de la pareja, los amigos, los primos etcétera. Me preguntaba si de alguna forma proseguimos un modelo y reproducimos lo que vimos.
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No obstante, no siempre es de esta forma, este mismo estudio verificó que muchas mujeres solo fingen el gemido a fin de que su pareja no se sienta mal y pueda llegar al orgasmo, si bien ella no lo esté disfrutando. “El enfrentamiento sobre la relevancia del tamaño del pene se encuentra dentro de los más longevos y controvertidos que hay en la sociedad ya que cada individuo, sin importar lo más mínimo su género, tiene una opinión al respecto”, señala Alberto Gooding, responsable de Comunicación de LELO en España. “Sin embargo, se puede destacar que a la inversa de lo que la mayor parte de la gente piensa, la importancia del tamaño del pene para la obtención de exitación es una cuestión mucho más sicológica que física”, añade Gooding. Es mucho más, derivado de exactamente la misma cultura y la misma pornografía que observamos, varios de estos gemidos se acostumbran a llevar a cabo y/o exagerar para fingir exitación. Y sobre todo a lo que las mujeres tiene relación, puesto que muchas veces son ellas las que exageran el ruido con intención de subir el ego de su pareja, la mayor parte hombres; para qué exactamente engañarnos.
De nuevo buscando un referente, hallé que en estos videos sigue siendo en la mayor parte de los casos (o al menos en los vídeos que vi), que es la mujer la que gime mucho más que el hombre. Percibir los gemidos de la pareja optimización el rendimiento sexual propio y la satisfacción ajena. Ese efecto también resulta útil cuando el propósito de la mujer es acabar cuanto antes. El 66% de las mujeres admitió que en alguna ocasión habían simulado o exagerado los gemidos para acelerar la eyaculación de su pareja y de esta manera evitar molestias, aburrimiento o fatiga. Si gemir es deseable y tiene una función, ¿pasa lo mismo con lo que los anglos llaman dirty talk?
Una vez dejas de reprimirte experimentarás tu sexualidad de una manera cien% diferente. Si el hombre gime durante el encuentro sexual, es pues el exitación que siente lo ocupa, por lo que no puede callar u ocultar esa sensación y lo libera a través del gemido. Aunque claro, el problema es que no todo el mundo se siente cómodo/a emitiendo estos gemidos.
«Los gemidos informan a nuestra pareja de qué es placentero y pueden accionar asimismo como retroalimentación de la excitación de quien los escucha haciendo que aumente asimismo su deseo, puesto que sentir como goza nuestra pareja tiende a ser un estímulo erótico muy fuerte», reflexiona Díaz Saco. La verbalización del exitación en el sexo no es solo patrimonio de los humanos. Los gemidos también son característicos de las hembras de primates promiscuos como los chimpancés y los bonobos (lo mucho más próximos a nosotros), y tienen como función captar mucho más machos para conseguir los más destacados espermatozoides y acrecentar la posibilidad de quedar embarazadas. Sin embargo, esto no pasa con las hembras de primates que son monógamos como los gibones o los gorilas.
Pienso que los hombres que gimen muy fuerte de debe a su naturaleza. No creo que los hombres no giman por vergüenza, en México podríamos decir que quizás es por el machismo, aunque tampoco estoy seguro de eso. Pero asimismo por una opresión propia, o por el hecho de que se cree que el hombre es el que debe ofrecer placer a la mujer. Otro estudio realizado por el sexólogo Antoni Boliches revela que se ha predeterminado que los hombres se concentran primero en la pareja y disfrutan de ver a la mujer, y en el momento en que ellos consiguen gemir es justo momentos antes o durante el orgasmo.
Ahí podría estar una parte de la clave de que la mujer de hoy parezca insaciable en el sexo. Esto es, que le cuesta arrancar más que al hombre, pero una vez metida en harina, precisa más candela. Pero este no es el tema que hoy nos ocupa, sino el papel de las llamadas \’vocalizaciones copulatorias\’. Interesante, nunca me había puesto a meditar o a equiparar si mi pareja gime igual, aproximadamente fuerte que yo. Ahora que lo pienso, pienso que personalmente me gusta que si lo hagan pero con intensidad moderada tal como creo que lo hago yo, que él sepa que lo disfruto y que yo sepa que él asimismo, pero que quedé en nuestra intimidad sin que nadie mucho más se entere.
Sexualidad
Asimismo, también hay un complejo de comparación denominado “síndrome del vestuario”, que se refiere a la inseguridad y frustración que sienten algunos hombres por meditar que su integrante es inferior al de otros hombres”, aseguran desde la marca de juguetes eróticos. La banda sonora de toda película porno son los gemidos liberados de las protagonistas. Los directores saben bien que es un detalle fundamental para poder en el público masculino el efecto pretendido de una manera rápida e intensa. La voz femenina excita a sus parejas pues les transmite deseo y les reafirma en sus capacidades amatorias. La pregunta es si esos jadeos son una consecuencia de su propio placer o un arma para lograr el propósito sexual que buscan en los hombres.
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Transmitirle a tu pareja con palabras que lo hace bien, que te gusta, que lo estás disfrutando o, todo lo contrario. El hecho de charlar entre nosotros/as os convertirá en mejor amantes cuando estéis junto/as. “No pienses que eres una \’guarra\’ o \’fácil\’, o que suenas como una estrella porno. La gente que abochornan a las mujeres por ser estruendosas durante el sexo son unas terminados hipócritas pues la mayoría de la pornografía muestra a las mujeres que son fuertes y escandalosas a lo largo del acto. Las empodera”, añade la otra.
Todo apunta a que a la mayoría de los hombres les gusta escuchar como su pareja chilla, ya que tienen la sensación de que lo hacen bien y más que nada, que la chica está disfrutando. Sin embargo, en algún instante asimismo les viene a la cabeza cosas como que los vecinos podrían estar escuchando o todavía peor, pensar que alguien les está oyendo y que pueda meditar que algo malo sucede con tanto alboroto. Te has cuestionado alguna vez exactamente en qué piensan los chicos en el momento en que están manteniendo una relación sexual donde la muchacha muestra su placer a través de gemidos y gritos. Ya que la parecer, en varias cosas pero lo más común es que crean que lo hacen bien y que su pareja está disfrutando mucho merced a él. Las participantes completaron una sucesión de cuestionarios en los que revelaban el género de relación de pareja que mantenían, la frecuencia de sus orgasmos, la intensidad de sus gemidos, el instante en que los emitían y las reacciones que provocaban.